Islandia
Islandia es un país donde la naturaleza muestra su lado más salvaje y fascinante. Entre glaciares inmensos, cascadas estruendosas y volcanes humeantes, cada rincón parece sacado de otro planeta. Su geografía, moldeada por el hielo y el fuego, regala paisajes únicos que cambian con las estaciones: desde la luz infinita del verano bajo el sol de medianoche hasta las noches invernales iluminadas por auroras boreales.
Reykjavík, su capital, combina el encanto de una pequeña ciudad nórdica con una escena cultural vibrante y moderna. Más allá, rutas como el Círculo Dorado o la carretera que rodea la isla permiten descubrir géiseres, playas negras, lagunas glaciares y zonas termales donde relajarse en aguas cálidas al aire libre.
Islandia es también un paraíso para los amantes de la aventura: senderismo en parques nacionales, navegación entre icebergs, excursiones a cuevas de hielo y avistamiento de ballenas son solo algunas de las experiencias posibles. Un destino donde la conexión con la naturaleza es absoluta y cada día ofrece un paisaje nuevo e irrepetible.
Destacados de Islandia
Información útil
Moneda
Corona islandesa (ISK)
Visado
No requerido, solo DNI
Religión
Oficialmente laico, con tradición cristiana luterana
Vacunas obligatorias
No se requieren
Idioma
Islandés. Se habla inglés fuido.
Cuándo visitar Islandia
- Muy recomendado
- Recomendado
- Poco recomendado
De junio a agosto
El verano islandés ofrece temperaturas más suaves, días muy largos y el fenómeno del sol de medianoche en el norte. Es la mejor época para recorrer el país por carretera, acceder a las Tierras Altas y disfrutar de rutas de senderismo sin nieve. Además, la fauna está muy activa, con posibilidades de avistar frailecillos y ballenas.
Febrero, marzo, septiembre y octubre
Estos meses combinan cielos despejados, noches suficientemente largas y buenas posibilidades de ver auroras boreales. Aún es posible disfrutar de actividades invernales como motos de nieve o cuevas de hielo, pero con menos horas de oscuridad que en pleno invierno.